Esta compleja situación está relacionada con una variedad de factores y circunstancias
históricamente determinadas por características sociales, económicas, políticas y
culturales reflejadas particularmente en la problemática agraria, como resultado de las
tendencias impuestas en los años ochenta y noventa en la política económica, como el
manejo macroeconómico, en particular, la revaluación del peso, la apertura económica,
el cambio climático y los impactos del conflicto armado (Fajardo, 2002, p. 4).
Según Loaiza, Y. L., & Perdomo, M. F. P. (2021) permite reconocer como la
visibilizarían de la trayectoria y los componentes formativos son asociados a las
dinámicas sociales y culturales de cada actor, otro elemento para considerar en la
dinámica territorial del corregimiento de Pueblo Nuevo, relacionada con la economía
campesina, es el acceso y la tenencia de la tierra. Esta está determinada por una alta
informalidad en los derechos de propiedad, ampliación constante de la frontera agrícola
y proliferación de los minifundios (pequeñas propiedades), no suficientes para
emprender un proyecto productivo rentable. Predios que en su constitución son de 1 a
10 hectáreas (has) en promedio (Líder de Unidad de Paz y Posconflicto, comunicación
personal, agosto de 2017)
.
Adicionalmente, la entrada de la coca puso en riesgo la seguridad alimentaria en el
corregimiento por la tendencia al monocultivo el cual ocasionó una profunda
dependencia de los ingresos de esta actividad (Cruz y Chaparro, 2017, pp. 47, 48). La
bonanza cocalera produjo no cultivar más el pan coger por parte de los campesinos para
comprar la gran mayoría de los alimentos básicos, solidificando la pérdida de vocación
productiva, así como el encarecimiento del costo de vida.
Algo semejante ocurre con la oferta de bienes públicos por parte del Estado en territorios
como el municipio de Briceño. Estos son objeto de discriminación, al tener presencia de
una actividad ilegal perseguida por las instituciones públicas. La presencia de cultivos
las convierte en objeto de políticas represivas, apoyadas por la comunidad internacional
y el Estado central, presencia reducida a la de las fuerzas armadas para reprimir dichas
actividades (Cruz y Chaparro, 2017, p. 35). La provisión de bienes públicos esenciales
como la infraestructura vial, escolar y la salud han quedado rezagados en el
corregimiento
Por lo tanto, el territorio es factor clave para la promoción de políticas de desarrollo
rural, políticas ambiciosas resguardadas hoy tras la firma del acuerdo de paz entre la
guerrilla de las FARC-EP y el Gobierno de Juan Manuel Santos. Este acuerdo tiene entre
sus objetivos principales transformar de manera estructural el campo para impulsar el
desarrollo del país. Briceño hace parte de este ambicioso proyecto al ser objeto de
Estos datos son de difícil profundización, debido a la carencia de información institucional detallada
como la existencia de un catastro actualizado.